Termostato cervecero

¿Cuál es la temperatura recomendable para una cerveza en otoño?

Llega el otoño, y después de él vendrá el invierno. Y quizás te asalte la cabeza una duda bastante recurrente entre los iniciados a la cerveza artesana… ¿es recomendable consumir una cerveza a una temperatura diferente a la del verano?

Y llegado al punto en el que nos toca responder vamos a virar el argumento principal desde la época del año hasta el estilo de cerveza que vayas a consumir. Y es que la recomendación de temperatura de servicio de una cerveza no varía tanto en función de la estación del año y sí en función del tipo de cervezas que vas a tomar.

Tengamos además en cuenta que una temperatura poco adecuada puede hacer que la experiencia cervecera cambie por completo. Tanto si nos pasamos por abajo y en vez de una cerveza fría lo que tomamos es una cerveza congelada (menos de 4 -5ºC); como si nos pasamos por arriba y en vez de una cerveza a temperatura de bodega lo que tomamos es un caldo de cerveza (más de 12-14ºC). Toda temperatura por tanto entre los 4-5ºC y los 12-14ºC estará en el rango adecuado.

A partir de este punto deberemos fijarnos bien en el estilo de la cerveza a consumir, para ajustar la temperatura dentro de ese rango.
- En líneas generales, cuanto más rubia y clara, más ligera de cuerpo y menos alcohol tenga una cerveza más fría es recomendable tomarla.

- Por su parte, cuanto más oscura y densa sea o más graduación alcohólica tenga, a mayor temperatura será aconsejable tomarla.

Por tanto, si nos centramos en estilo concreto de cerveza, tomaremos más frías las: Lager, Pilsner, Blond Ales o cervezas de trigo (Wheat Beers).

En un rango medio tendremos cervezas más corpulentas como las: American Pale Ale, Indian Pale Ale o Brown Ale.

Y en el otro extremo, más calientes (a temperatura de bodega), tendremos las cervezas de Abadía, las Porter, las Stout, las envejecidas en barrica, etc.

Te recomendamos echar un ojo al siguiente gráfico del libro Tasting Beer de Randy Mosher.

En el caso de que estemos en casa, donde, en la mayor parte de los casos, sólo tendremos el frigorífico como único medio para enfriar las cervezas, deberemos tener en cuenta que la temperatura media del mismo rondará los 5-6ºC. Por tanto, calcula un pequeño margen de tiempo para que tu cerveza repose una vez fuera del frigorífico, si buscas una temperatura de consumo algo superior.

Sabemos que es duro aguantarse a abrir el botellín una vez lo has sacado de la nevera pero... ¡la espera valdrá la pena para degustar al 100% lo que su maestro cervecero ha querido aportar a la cerveza!

Y por supuesto, como todo en la cata de la cerveza, la experiencia es un grado. Poco a poco irás encontrando esa temperatura perfecta para ti y tus estilos de artesana.

¿Estás preparado? ¿Ya tienes tu despensa llena de artesanas para hibernar durante el invierno?

¡Happy Beer Day!

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