Los 7 superalimentos que debes tener en tu cocina

Estamos seguros de que, a estas alturas, ya has oído hablar de los superalimentos en la tele , algún podcast o revista… Y no nos extraña porque los superalimentos tienen numerosos beneficios para la salud. Los superalimentos saludables son alimentos naturales con un valor nutricional excepcional: contienen una concentración muy elevada de minerales, vitaminas, oligoelementos, micronutrientes, ácidos grasos esenciales y antioxidantes en un volumen reducido. Perfectos para aumentar la energía y la inmunidad.  Vale, muy bien, pero, ¿cuáles son los superalimentos y sus verdaderos beneficios para la salud? Hoy te contamos todo sobre los superalimentos, con una selección de los 7 mejores superalimentos y cómo integrarlos en nuestra cocina.

• Definición de los superalimentos: ¿qué son?
  • ¿Qué diferencia los superalimentos de los alimentos convencionales?
  • ¿Qué dice la OMS de los superalimentos?
• Lista de los superalimentos más importantes
  • Las naranjas y los kiwis
  • El brócoli
  • El tomate
  • Almendras y nueces
  • El aceite de oliva
• Cómo integrar los superalimentos en la dieta

Definición de los superalimentos: ¿qué son?

Los superalimentos son alimentos frescos muy ricos en nutrientes y micronutrientes. Suele tratarse de verduras, frutas, semillas, especias, plantas, algas o determinados aceites. Ya verás que, cuando te desvelemos los nombres, te darás cuenta de que en realidad ya los conoces. Entonces, ¿por qué ahora se habla tanto de superalimentos y superfood? 

Si bien no es una categoría de alimentos reconocida científicamente, tampoco se trata de una simple estrategia de marketing. Lo cierto es que los superalimentos son más eficaces que otros para mantenernos sanos, gracias a su excepcional riqueza en nutrientes, antioxidantes, minerales y vitaminas que contribuyen a reforzar nuestro sistema inmunitario y nos protegen de forma natural de numerosas dolencias.

¿Qué diferencia los superalimentos de los alimentos convencionales?

Un dato no menor es que el 99% de los superalimentos proceden del mundo vegetal y  tienen una concentración muy elevada de minerales, vitaminas, oligoelementos, micronutrientes, ácidos grasos esenciales y antioxidantes (en un volumen más pequeño). Esta es la definición de densidad nutricional, y es lo que ayuda a convertir un alimento “simple” en un auténtico superalimento.

Así pues, aunque todas las frutas y verduras son alimentos innegablemente sanos y tienen sus propias cualidades nutricionales, ¡no todas pueden presumir de ser superalimentos!

Un auténtico superalimento debe cumplir los siguientes criterios:

• Aportar una cantidad muy elevada de uno o varios nutrientes, principios activos o sustancias vitales, y significativamente superior a la de los alimentos habituales.
• Ser lo más natural posible y proceder de la producción ecológica o de cultivos silvestres.
• Ser un alimento completo e integral. Una sola vitamina o sustancia vegetal extraída también puede tener un gran efecto, pero no es un superalimento, sino un complemento alimenticio. ¡Gran diferencia a tener en cuenta!
• No tiene por qué tener un sabor delicioso.
• Tampoco tiene que ser fácil de masticar ni caro, como se suele suponer, es un falso mito.

¿Qué dice la OMS de los superalimentos?

La Organización Mundial de la Salud (OMS) detalla qué alimentos no pueden faltar en tu dieta por sus excelentes propiedades. Los superalimentos son la nueva tendencia en nutrición y dietética porque todos estos alimentos tienen propiedades saludables y son recomendables para el bienestar físico y mental. 

Todos sabemos, y también lo proclama la OMS, que lo mejor para llevar una vida saludable es tener una dieta equilibrada, un sueño reparador y hacer ejercicio físico. Si bien todos somos distintos y cada persona necesita lo suyo, más o menos horas de sueño, alimentos más salados o más dulces, correr o jugar al tenis,  lo que es cierto y común a todos es que los superalimentos sientan bien y son necesarios.

Lista de los superalimentos más importantes

Ya va siendo hora de desvelar cuáles son esos superalimentos tan importantes, ¿o pensabas que te íbamos a dejar en ascuas? 

Existen numerosos ejemplos de cómo los superalimentos pueden reforzar el sistema inmunitario, ralentizar los efectos del envejecimiento, compensar carencias, proteger el sistema cardiovascular y reducir el riesgo de cáncer. Por supuesto, son específicos de cada superalimento, pero también de la forma en que se utilizan (crudos, cocidos, en zumo,, etc.) 

Es importante tener en cuenta que no existe una receta milagrosa y que los beneficios de los 7 superalimentos que listamos a continuación dependen de cómo se consumen y del organismo de cada uno.

Las naranjas y los kiwis

Las naranjas y los kiwis son dos fuentes naturales de vitamina C, ácido fólico y antioxidantes. Ambas frutas son magníficas herramientas para combatir los radicales libres y cuidarnos en otoño e invierno.

Las naranjas, a veces dulces, a veces ácidas,, son un auténtico referente en lo que a frutas se refiere. Presente en los puestos del mercado durante todo el año, las naranjas han sido descritas como un auténtico superalimento, gracias a los numerosos beneficios que aportan al organismo. 

En cuanto al kiwi, podemos decirte que, además de ser un excelente alimento para regular el tránsito intestinal, también es considerado superalimento por su gran poder nutritivo: contiene 17 vitaminas y minerales, como las vitaminas E y B9, potasio, fósforo y calcio.

El brócoli

El brócoli es otro alimento que contiene una gran cantidad de vitamina C. Destaca también por su bajo aporte calórico y gran cantidad de agua, además del interesante aporte de fibra. Es fuente de antioxidantes, vitaminas A, E, B6 y es considerado un potente anticancerígeno. El brócoli es una de las hortalizas más interesantes desde el punto de vista nutricional.

El tomate

El tomate es un superalimento que destaca por su elevado contenido en vitamina C, su escaso contenido calórico y su excelente aporte de agua. Está considerado como un gran neutralizador de radicales libres (son conocidos los beneficios que su ingesta tiene para la piel) y es un reductor de colesterol. 

Además, el tomate favorece la función renal y el tránsito intestinal. Es fácil de utilizar como parte de una dieta de adelgazamiento gracias a su bajo contenido en calorías, proteínas, grasas e hidratos de carbono. Por otra parte, contiene una gran cantidad de agua, esencial para la hidratación. Y, por último, es un producto muy versátil, por lo que es posible utilizarlo en multitud de recetas.

Almendras y nueces

Las almendras y las nueces son los dos frutos secos más beneficiosos para el organismo por su elevado aporte de ácidos grasos. De hecho, son fuente natural de Omega3, además de vitamina E y fibra. Están considerados un excelente superalimento para regular el colesterol y cuidarse el corazón, e incluso para prevenir la aparición de ciertos tumores.

Las almendras son muy ricas en magnesio y se dice que tienen el poder de reducir el estrés y aliviar los trastornos del sueño. Un puñado de almendras puede relajar los nervios y los músculos cuando se está estresado, al reducir el cortisol (la hormona del estrés). Además, el consumo de almendras aumenta la secreción de melatonina (la hormona del sueño) y ayuda a combatir el insomnio, a veces provocado por la falta de magnesio. ¿De verdad te vas a quedar sin comer almendras?

En cuanto a las nueces, se trata de un superalimento que que ayuda a regular  tránsito intestinal, disminuye el colesterol malo , previene la diabetes de tipo 2 y ayuda contra los reumatismos, entre muchos otros beneficios. ¿Un truco? Si quieres encontrar ese sabor genuino de la nuez, déjalas remojar toda una noche en leche (¡sin la cáscara, evidentemente!).

El aceite de oliva

¿Qué decirte que no sepas ya del aceite de oliva? Simplemente que es una de las grandes bases de la archiconocida dieta mediterránea y el superalimento por excelencia. Son conocidas sus propiedades antioxidantes y su capacidad para reducir el colesterol, además de ayudar a rebajar la tasa de infartos, tener cualidades anticancerígenas e incluso por su capacidad para ayudar a frenar (en la medida de lo posible) enfermedades como el Alzheimer.

La OMS también destaca las magníficas cualidades de otros productos como el cacao o el chocolate, las legumbres, el ajo, el pescado azul o la spirulina. ¡Anímate a probarlos!

Cómo integrar los superalimentos en la dieta

Ya sabes que ningún alimento, ni siquiera uno etiquetado como superalimento, puede proporcionar todos los beneficios nutricionales  que nuestro cuerpo necesita. Por eso, los 7 superalimentos de nuestra lista se deben complementar con una dieta sana y equilibrada. Incorporar uno o dos superalimentos a tu rutina alimentaria te ayudará a conseguir un equilibrio entre cuerpo y mente a largo plazo y a mejorar tu bienestar general.

Hay distintas formas de añadir un superalimento a la dieta:

• Con la fruta de temporada es muy fácil porque puedes consumir tu superalimento fresco, en zumos o batidos.
• También puedes preparar sopas o ensaladas con superalimentos vegetales y añadir vinagre de sidra, por ejemplo, para obtener resultados rápidos.
• Si utilizas superalimentos en polvo, añádelos simplemente mientras vas preparando tus platos.

Ahora que ya sabes mucho sobre los superalimentos, te recomendamos informarte también sobre la comida saludable y acudir a alguno de los mejores restaurantes que hemos seleccionado para ti porque sí: es totalmente compatible comer en el restaurante y comer superalimentos.